jueves, 6 de marzo de 2008

Las motivaciones y el ciclo mente-cuerpo

Elio Zerpa Márquez
Basado en los experimentos del Dr. Joe Dispenza

Cuando pensamos producimos sustancias que nos hacen sentir como pensamos. Si nuestros pensamientos son positivos, producimos sustancias positivas, que nos hacen sentir de esa forma. Pero, si nuestros pensamientos son negativos, nuestro cuerpo produce sustancias que nos hacen sentir tristes, deprimidos, en fin como pensamos.

Cuando el cuerpo comienza a sentirse como pensamos hacemos que se produzcan más sustancias, que aumentan la sensación y entonces nuestra mente comienza a pensar como nos sentimos, entrando en un círculo o ciclo mente-cuerpo. A tal punto que nuestros pensamientos se convierten en el resultado de cómo nos sentimos.

Para romper este ciclo es necesario cambiar nuestra forma de pensar, y para cambiar nuestra forma de pensar es necesario reflexionar sobre algunas preguntas básicas:

¿Qué quiero ser?
¿Qué quiero cambiar?
¿Qué necesito para ser la persona que quiero ser?
¿Qué persona que conozco tiene esas características que yo deseo?

No sólo basta con pensar en las preguntas y obtener algunas respuestas, la diferencia esta en la capacidad de mantener este pensamiento y llevarlo hasta lo último. Nuestra habilidad, como toda habilidad debe ser desarrollada.

Si queremos romper el ciclo, debemos ser capaces de mantener el pensamiento, de enfocarnos en las respuestas, de tomar eso que queremos ser y mantenerlo en nuestro sistema alerta, nuestro foco de atención. Porque aunque desde el subconsciente nuestro pensamiento esté generando resultados, la verdadera diferencia se va a crear cuando logremos que ese pensamiento se convierta en nuestra nueva realidad, ya que nuestro pensamiento y nuestro cuerpo actuarán de esa manera y como resultados, estaremos viviendo en situación diferente a la que estaba dando los resultados anteriores.

Los ciclos de acción de las personas están regidos por el lóbulo frontal, si lo entrenamos, lograremos que las personas cambien sus ciclos de comportamientos.

La inspiración y la generación de nuevas posibilidades debe ser parte fundamental de las personas y especialmente de los trabajadores. En general la motivación se ubica en esta zona del cerebro, que a la vez está asociada con las sensaciones de alegría y felicidad. Si entrenamos a las personas para que activen su lóbulo frontal, estas será capaces de sentirse felices y a la vez estar motivados.

Si toda conducta está antecedida por una motivación, entendemos que si queremos que las personas hagan cosas diferentes, tendrían que tener motivaciones diferentes. Pero para esto, necesitamos entrenar a las personas para que desarrollen su capacidad de visionar un futuro diferente. Si son capaces de ver un futuro diferente y mantener en su mente la idea por más y más tiempo, esto generará conductas diferentes.

Sin embargo, es muy común observar personas que se mantienen siempre haciendo lo mismo, evitan hacer cosas diferentes, incluso si se les cambia el panorama, estás se molestan o simplemente se sienten frustradas o desorientadas.

Esto se debe a que no han ejercitado su capacidad de motivarse, no han desarrollado la capacidad de mantener una idea diferente en su mente y como resultado las ideas anteriores vuelven a su mente. Estas ideas anteriores terminan en muchos casos venciendo a las nuevas ideas, ya que no somos capaces de concentrarnos en lo que deseamos.

La ecuación resultante se describe de la siguiente manera:

Las organizaciones tienen resultados actuales, porque tienen a las personas actuales, con las motivaciones actuales, que dominan el ciclo mente cuerpo. Para obtener resultados diferentes, debemos modificar las motivaciones de las personas, entrenar su capacidad de mantener ideas nuevas en su mente con una visión de futuro diferente y esto cambiará el ciclo mente cuerpo, por ende las conductas de las personas serán diferentes, obteniendo resultados diferentes y la organización pasarán a tener los resultados que esperaba.

Sin embargo, la ecuación tiene unas variables externas que van a afectar a los sujetos, porque en cuento el mundo exterior se mantenga igual, impulsará a los pensamientos anteriores a mantenerse como ideas fijas dentro del cerebro.

Para esto se plantea la necesidad de establecer una red de pensamiento global, que afecte directamente al entorno y que a la vez el sujeto afecte a las personas del entorno, haciendo que la nueva idea se mantenga presente dentro del sujeto. Veamos dos ejemplos.

Imaginemos que hay una nueva forma de hacer las cosas en una empresa, los empleados son entrenados, se invierte el dinero necesario para que cuenten con todos los recursos técnicos para facilitarles la nueva forma de trabajo, pero los supervisores siguen funcionando de la misma manera y los resultados se siguen evaluando igual. Esto haría que la nueva idea dentro del sujeto y su motivación para hacer las cosas de forma diferente se vuelvan a la forma anterior, ya que el entorno impulsa las viejas ideas a volver al foco de atención de los sujetos.

En otro ejemplo, tenemos la misma situación, pero hacemos que todos los trabajadores, supervisores y personas del entorno funcionen como una red de apoyo al nuevo sistema. Siendo parte de un sistema que mueve a nuevas formas de hacer las cosas y de obtener resultados diferentes, la idea del nuevo proceso se fija en las personas y cuando cualquiera de los miembros de la red comienza a divagar, esta misma red de apoyo orienta a los sujetos a mantenerse en la nueva idea. Los sujetos funcionan como receptores y emisores de las nuevas ideas.

Cómo punto final de esta parte y como punto de partida del cambio, encontramos que para hacer cosas nuevas debemos ver el mundo de otra forma y hacer nuevas conexiones en nuestro cerebro, esto significa aprender. La única forma en que las personas cambien es que aprendan cosas nuevas, nuevas formas de experimentar la vida, de ver su futuro y para que los cambios organizacionales sucedan, es necesario que las personas de las organizaciones cambien, es decir que aprendan.

Una empresa comprometida con el cambio, es una empresa comprometida con el aprendizaje.

1 comentario:

María Mercedes Gómez dijo...

Interesante artículo.
Cuando se comprenden las emociones y el importante mensaje que transmiten, no hay que esperar a que algo se manifieste experiencialmente para comprender qué clase de vibraciones se han emitido, sino que lo que se siente indicará exactamente hacia dónde la persona se está dirigiendo.
Céntrase en lo que deseas, no en lo que deseas evitar parece ser la clave para el logro y el aprendizaje.
Gracias por compartir.
¡Mucho éxito en tus nuevos caminos!